No
tengo plata ni oro
Pero
palabras por montones para regalarte
Y
no es que quiera darte lo que a mí me sobra
Como
migajas a las aves
Sino
que ellas brotan como manantiales de mi cabeza
Y
son el gran tesoro que puedo entregarte
Como
sinónimo de este aprecio que tengo por ti...
¿Qué
fue lo que me sucedió?
¿Qué
me atrajo de ti?
¿En
qué minuto llegué a sentir ésto?
Nunca
pensé en conocerte, Nunca pensé en
compartir contigo una sonrisa, unas palabras, un par de besos y algo más. Tampoco
pensé en llegar a decirte que me gustó todo aquello, sobre todo tu mirada
sincera, tus labios miedosos y esas manos tímidas pero cálidas.
Unos
días, unas horas, unos minutos. El tiempo que haya sido no me importa, porque
bastó para iluminar mi alma otra vez y
darme cuenta que mis mejores sentimientos no han muerto, aún me acompañan. Sólo
descansaban de tanto agobio terrenal.
Sé
que no llegué en el tiempo indicado a tu vida, pero ¿Cuál debe ser el instante propicio
para que el corazón actúe? Y aunque sea un error su actuación ¿Podría ser una
condena?
Quiero
entender que no es tu momento. Y quiero creer que me entiendes un poco.
¡Ahora
mírame! Estoy lejos de tu mundo, tal vez vengo de uno muy distinto al tuyo. Tengo
mis alas de independencia rotas, estoy esperando respuestas del cielo y ¿No sé
qué sucede en tu mundo? ¿Cuáles son esas heridas que estás tratando de sanar?
“HOY
NO ES EL TIEMPO Y QUIZÁS TAMPOCO LO SEA MAÑANA”.
Comprendo
que sólo estés pensando en renacer, sanar y volver a experimentar sin miedos
toda clase de emociones.
Comprendo
que no quieras ningún problema en tu cabeza, ni tengas cabeza para propuestas de otros.
Comprendo
que el amor es un juego de dos y que tal vez no pueda ser la cura de tus males
Pero
quiero que sepas y que no olvides
Que
me hubiese encantado haberla sido y no conforme con eso, ser mucho más que una
simple cura para tus emociones dañadas.
Y
ésto es lo que no puedo ocultarte: Esas sensaciones que experimenté contigo, de
las cuales no estoy arrepentido y no quiero olvidarme. Y sería feliz,al menos, sabiendo
que mis palabras caen en un pequeño sector de tierra fértil dentro de tu
corazón.
Escrito desde mi corazón para ti, Fredy.